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sábado, 30 de mayo de 2020

Esta es su historia: La Mara Salvatrucha

La Mara Salvatrucha es la pandilla más peligrosa de Centroamérica. Surgida en los años '80 en las calles de Los Ángeles luego de que algunas pandillas escaparan de las guerras que en aquel momento acaecían en Centroamérica, acostumbran a asesinar, extorsionar, traficar drogas y personas. Se distinguen por sus tatuajes con diversos significados. Y porque solamente cuidan de los suyos.


DESDE ARGENTINA- La Pandilla Mara Salvatrucha se originó en varias ciudades de los Estados Unidos. Una de ellas es Los Ángeles. A partir de la década de los '80, tras las guerras civiles en el "Triangulo del Norte", los individuos comenzaron a migrar hacia los Estados Unidos. El  "Triangulo del Norte", refiere a Guatemala, Honduras y el Salvador- éste último posee un gran índice de muertes debido a los asesinatos cometidos por Las Maras.

Entonces, estos grupos que migraban hacia los Estados Unidos provenían de Guatemala, Honduras y El Salvador. Buscaban nuevas oportunidades para sus vidas y para poder progresar, con el fin de poder reinsertarse en la sociedad nuevamente, siguiendo el "Sueño Americano". Pero allí no fueron bienvenidos, por lo que comenzaron a formar grupos “pandilleros” como se los conoce comúnmente y se aliaban a otros  que ya estaban radicados allí. Esta situación provocó el descontento del gobierno que estaba al frente en ese momento, que era el de Donald Reagan, por lo que comienzan a ser expulsados y deportados a su lugar de origen. Es allí cuando estos pequeños grupos comienzan a convertirse en lo que son hoy en día, y a tomar forma de "pandillas". Y así es como también empezaron a expandirse hacia Europa.

Esta temida pandilla es conocida por ser la más peligrosa de Centroamérica y actualmente se encuentran en el Triangulo del Norte. Las dos facciones más conocidas y temidas por muchas personas (en las que se divide La Mara Salvatrucha) son; la MS13 y la MS18 el eterno rival de la Mara Salvatrucha 13. Esta última se divide en el Barrio 18-Los Sureños y el Barrio 18 - Los Revolucionarios.

Respecto al nombre, la letra `M` hace referencia a "la Moribunta", un tipo de hormiga que arrasa con todo lo que tiene a su paso (la Mara Salvatrucha lo hace a través de la propagación de terror con sus diferentes técnicas) y la `S` que hace referencia al termino "Salvatrucha" que es un gentilicio de Salvadoreño. En sus comeinzos el nombre que ellos utilizaban o con el que se hacían conocer era el de "Salvatruchastoners" (MSS): utilizaban el cabello largo, camisas que hacían alusión al heavy metal y otras bandas de Rock, jeans rotos y zapatillas All-Stars.

Para poder mantenerse como grupo debían someter a la sociedad y traficar drogas (también personas). Así es como adoptan el `modus operandi` de pandilla. Los años pasan y la MSS comienza a verse implicada en diversos delitos. Una vez que entraron al sistema penitenciario comenzaron a cortarse el pelo y adquierieron un estilo semejante al de los pandilleros mexicanos (para poder integrarse y masificarse).

Respecto a las señales de Las Maras podemos hablar de los tatuajes que portan por todo el cuerpo, los grafitis y "el Argot" que refiere a la jerga que ellos utilizan diariamente. Muchos inscriben en su piel las siglas "MS-13". En general, cada uno de los dibujos posee diversos significados, que para la mayoría son totalmente desconocidos. A diferencia de su contrincante más importante, pueden tatuarse desde los brazos, la espalda y hasta la cabeza- la MS18 solo puede tatuarse los brazos y el pecho. Dentro de los diseños se incluyen lagrimas pequeñas que hacen referencia a cada ser querido asesinado; los tres puntos a la `Vida Loca’; plegarias; el Yin-Yang; Telarañas (refiere al poder de la unión); el alambre de púas (sometimiento y esclavitud); la Virgen de Guadalupe (invocan a un ser supremo); así como los números romanos. Cuanto más grande es el tatuaje, mas es el respeto hacia a alguien o algo. Por otro lado, los grafitis son un tipo de código que las pandillas utilizan para denotar pertenencia o simplemente para dar a entender algo, los cuales son plasmados sobre una pared a la que ellos refieren como "el diario de la calle” o “placazo”.

Los rituales que profesan mujeres y hombres son diferentes. En el caso de  las mujeres, precisamente una vendedora de drogas o una “cobradora de impuestos”, pueden ser reconocidas porque tienen una cartera de cordón atada a la cintura, por poseer el pelo teñido de  rubio, o por usar ropa de color rojo o amarillo. Además, las mujeres suelen violentamente explotadas, y dependen la mayor parte de sus vidas de un hombre. No tiene poder, pero a la vez, ellos consideran que tienen un rol muy importante en las pandillas de la MS-18 y la MS-13 porque asumen tanto los rituales, como las "tareas de la mujer" (cocinar, criar a sus hijos y a sus maridos). A veces se visten como hombres, ya que los jefes de hogar consideran que de este modo no serán sospechosas a los ojos de los policías o militares. Si quieren iniciarse en la pandilla podrán escoger el sometimiento a una paliza o tener encuentros sexuales con varios hombres, pero si una de ellas mantiene una relación amorosa con uno de los miembros de la pandilla son respetadas.

En el caso de los hombres, estos se dividen en CICLAS que son pequeños grupos en los que se subdivide en La Mara o cualquier pandilla en general. Éstas ejercen control sobre un territorio específico en "la colonia" o el barrio. Cada una de ellas tiene una tarea específica, y un jefe que da las indicaciones que deben ser llevadas a cabo.

Muchos de los gobiernos centroamericanos, que poseen altas tasas de pobreza. No son capaces de lidiar con este fenómeno de las pandillas. Y en la mayoría de las veces no hubo advertencias debidas por los Estados Unidos.
A nivel regional las actividades delictivas son pequeñas en relación a la proporción general, incluyendo así a la extorsión y narcotráfico en los barrios. Hay intenciones de de frenar el problema, pero la mayoría de las veces los resultados son negativos. 


Los Estados Unidos designó, en el año 2012, a la MS-13 como una organización criminal transnacional- por iniciativa gubernamental. Más allá de los miles de asesinatos en Centroamérica, la MS-13 también ha cometido atrocidades en los Estados Unidos. Esta designación por parte del gobierno de Donald Trump otorga la facultad a las autoridades competentes de perseguir formalmente a los miembros que forman parte de la pandilla. Así lo confirmó el director de la Agencia de Inmigración y Fronteras de Estados Unidos, John Morton:
Esta decisión nos permite atacar el corazón financiero de la MS-13.
Otra figura política que también muestra preocupación es Bukele, presidente de El Salvador, que asumió en el año 2019. El Salvador es uno de los países más afectados por las acciones de las pandillas. En épocas de COVID-19, el gobierno salvadoreño aplica medidas contra las pandillas que se encuentran en las cárceles de dicho país. Pero a raíz de estas iniciativas las criticas no se hicieron esperar. Ya que muchos consideran que podrían existir violaciones a los derechos humanos.
Las medidas tomadas por Bukele son aplicadas como represalía en respuesta a los asesinatos a más de cincuenta personas durante el lapso una semana, en las calles del Salvador. Una de las principales críticas al líder de El Salvador fue la de decidir mezclar las principales Maras dentro de las cárceles, en un total de 7 penitenciarías. Allí agrupa a miembros de La Mara Salvatrucha, Barrio 18, Mao –Mao y La Máquina. 

Otra crítica consiste en que el presidente autoriza el uso de la fuerza contra los presos. Frente a ello, dijo a la sociedad salvadoreña: 
Vamos a hacer que los pandilleros que cometieron esos homicidios, se arrepientan toda su vida de haber tomado esa decisión. 
El Salvador alcanzó su pico máximo- su récord- de asesinatos en 2015, con 6670 muertes.  Guatemala, en el año 2009, llegó a su punto más alto de crueldad desde de la Firma del Tratado de Paz en 1996 (del conflicto armado interno). Honduras, junto con el país guatemalteco, son los países más peligrosos- y esto se debe simplemente auna cosa: a la presencia de Las Maras.

Lo más importante es fomentar, facilitar y cooperar para el armado de un camino que finalice en una solidificación de un proceso de paz. Según dichos del portavoz de una facción de Las Maras (MS-13) de manera anónima: 
la mesa de negociación debe de estar compuesta por los partidos políticos, el gobierno, y por el principal rival de la pandilla: MS-18.
Por María Florencia Pereyra Seeliger
Florencia Seeliger, de 20 años, es estudiante de la licenciatura en Relaciones Internacionales de la Universidad de San Martin (Argentina). Fue voluntaria del XIV Congreso Nacional de Ciencias Políticas. Sus áreas de interés abarcan la política de Colombia y sus guerrillas, la crisis migratoria europea, el cibercrimen (Wikileaks y Cambridge Analytica), y las pandillas criminales.

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